
Si se sufre viendo los partidos del Sporting en el Molinón o en una sidrería, más se sufre viéndolos lejos de Asturias. Lo sabe bien Javier Ríos, actor gijonés afincado en Madrid, (Hugo en 'El Internado') que ayer se sumó a la mareona y tras hacer el examen teórico de conducir en Oviedo, se puso la camiseta para no quitarla en todo el fin de semana. Eso sí, ya en Gijón, «por el Sporting lo que sea», o casi.
-¿Dónde ve los partidos?
-Llevo 10 años en Madrid y al final la mayoría de mis amigos son asturianos, siempre nos juntamos para tomar sidra, comer fabes y hablar en asturiano, así que los partidos del Sporting, los vemos juntos y sufrimos juntos.
-Pero en Primera.
-Hombre, claro. Después de la temporada pasada en la que casi todo fueron alegrías ahora lo estamos pasando algo peor, pero siempre con esperanza.
-Usted es actor y de esperanza sabrá un rato.
-Sí, porque esta profesión es difícil. Yo curraba en una bolera en Gijón, ahorré algo de dinero y me fui a Madrid, allí he hecho películas y televisión, pero también muchos bares. De hecho hasta hace dos meses trabajaba en uno.
-'Noviembre', 'Días azules'... y ahora 'El Internado'. No se queje.
-No, no, pero he trabajado en 14 o 15 bares de Madrid, que conste. A veces es mejor poner copas que aceptar algunos papeles, y desde luego no se me caen los anillos.
-No, no, pero he trabajado en 14 o 15 bares de Madrid, que conste. A veces es mejor poner copas que aceptar algunos papeles, y desde luego no se me caen los anillos.
-Muchos actores creen que la televisión es una especie de segundo plato. ¿Usted?
-Yo me dedico a esto y me considero un cinéfilo. Reconozco que cuando hice 'Noviembre' era más extremista y seguramente no hubiera aceptado un papel como el que hago ahora en 'El Internado', pero tampoco hay que ser así. Con el tiempo vas cambiando y ves que se pueden hacer cosas si te abres un poco más y te haces más tolerante.

Nuevos proyectos
-Oiga, y encima 'El Internado' es un superéxito.
-Sí, sí, y es una muy buena serie, con estándares de calidad difícilmente visibles en otros programas. Se cuidan los detalles, tiene intriga, misterio y guiones interesantes. Es una suerte trabajar en ella.
-¿Le veremos pronto en el cine?
-Bueno con la tele he estado un poco liado, pero a lo mejor sale una película en Bilbao.
-Cuente, cuente.
-Hice un corto, 'El cruce', y ahora parece que el corto puede convertirse en una película, que se llamará 'La llamada' y es la historia de un piloto probador de motos, Patxi Salbide. El guión es bueno y además que la oportunidad salga gracias a un corto que hice porque me parecía interesante y que ahora pueda convertirse en una película es muy gratificante.
-Y en Asturias, ¿no le sale nada?
-He trabajado en casi toda España, pero nunca en Asturias. En comunidades como Galicia hay industria y posibilidades. Pero aquí ya no quedan ni cines, y eso es un espejo de cómo tratamos la cultura. Sin ella seremos mucho más egoístas y menos autocríticos.
-He trabajado en casi toda España, pero nunca en Asturias. En comunidades como Galicia hay industria y posibilidades. Pero aquí ya no quedan ni cines, y eso es un espejo de cómo tratamos la cultura. Sin ella seremos mucho más egoístas y menos autocríticos.
Hay está un gijones como yo, y orgulloso de su equipo. Da gusto tener sportingistas tan fieles por España repartidos.
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